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El 25 de marzo de 1906 se constituyó en Oviedo una comunidad de Carmelitas Descalzos compuesta por tres religiosos. Como una de las condiciones de fundación era construir un convento en las afueras de la ciudad, los Padres se dieron prisa en buscar terrenos y los hallaron a su gusto, arriba del Campo de San Francisco, en el llamado Campo de Maniobras, calle de Santa Susana 33, donde trazaron un convento al que se trasladaron de la casa alquilada en Martínez Marina 3, en noviembre de 1910. 

 En 1921 ya inauguraron un templo neogótico, que el tiempo declaró insuficiente. Al crearse la Provincia de San Juan de la Cruz, en 1927 se amplió la edificación.

 En 1934 ocurrió una terrible revolución en Asturias, y afectó especialmente a los Carmelitas y su obra. La comunidad, compuesta por veintiséis religiosos que trataron de refugiarse en casas de buenos amigos, fue capturada y encerrada en el Instituto de Enseñanza Media cercano al convento. En sus espíritus todos habían aceptado el martirio, aunque uno solo lo alcanzó: el Beato P. Eufrasio del Niño Jesús, prior de la comunidad, que al saltar la tapia del convento se fracturó una pierna. Trasladado al hospital, fue delatado por un enfermero al comité revolucionario, quien dispuso su ejecución inmediata. El P. Eufrasio puso el grito de ¡Viva Cristo Rey! sobre el estruendo de los fusiles. Fue Beatificado el 19 de octubre de 2007.

 Pasada la sangrienta guerra (1939), se reconstruyó con paciencia lo destruido. Fue en el año 1906 cuando nos hicimos presentes en tierras asturianas. Más tarde, en 1970 se nos pediría atender a esta comunidad parroquial.

 

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El Templo actual, amplio, moderno y funcional, es proyecto, incluida la torre, del arquitecto Don José Francisco Zubillaga. Mide 44 m. de largo por 26 de ancho, con capacidad para unas mil personas sentadas. Fue inaugurado por el Sr. Arzobispo de Oviedo, Don Gabino Díaz Merchán, el 1 de agosto de 1970, el mismo día en que se erigió esta Parroquia del Carmen.

La torre estuvo 30 años incompleta, a la intemperie, sin el   necesario revestimiento, con grave deterioro, interno y externo. Al final, se pudo    terminar en julio de 1986, gracias a la generosa colaboración de los   ovetenses, y al trabajo de  la empresa constructora   "Los Alamos". Recientemente ha sido restaurada, y hoy la contemplamos esbelta, rectilínea, elevándose hacia el cielo, como invitando a la oración.

Las vidrieras de la derecha representan diversas Advocaciones de la Virgen, en el Norte de España: Nuestra Señora de Covadonga, del Pilar, de Monserrat, de Valvanera, de Begoña y de Aránzazu. Fueron costeadas debido a gestiones del P. Prior de entonces, por las respectivas Diputaciones de Asturias, Zaragoza, Barcelona, Logroño, Vizcaya y Guipúzcoa. Las vidrieras de la izquierda representan los Santos Carmelitas: San Juan de la Cruz, Santa Teresa de Jesús, San José, (protector de la Orden), Santa Teresita de Lisieux, San Elías, y la Beata Ana de San Bartolomé. Todas las vidrieras son de la casa especializada del Sr. Cuadrado, de Madrid, el mismo que hizo las Vidrieras de la Catedral de Oviedo, destruidas por la guerra civil.

 

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